2014
El 49 Heineken Jazzaldia, celebrado en San Sebastián entre el 23 y el 27 de julio de 2014, concluyó en un ambiente de gran satisfacción, con un éxito artístico y organizativo refrendado por la masiva asistencia del público a los numerosos eventos programados y las buenas referencias en los medios de comunicación.
49 Heineken Jazzaldia
La cifra total de asistentes al 49 Heineken Jazzaldia se estimó en 140.000, siendo 12.650 los contabilizados en los conciertos de pago.
El programa abarcaba un total de 112 conciertos, de ellos 78 gratuitos, en 17 escenarios repartidos por toda la ciudad. Todos ellos se llevaron a cabo con total normalidad y con buen tiempo en general, con la excepción de algunos chubascos en la noche del día 24.
La esencia jazzística del Festival se concentró, como es habitual, en la Plaza de la Trinidad, el Auditorio del Kursaal y el Teatro Victoria Eugenia.
El concierto a dúo, piano y contrabajo, de Chick Corea y Stanley Clarke en el Auditorio pasará a la historia del Festival. El público aplaudió a rabiar la sabiduría musical y la compenetración de los dos fundadores de Return to Forever. La sala casi se vino abajo cuando, en el bis, apareció Bobby McFerrin a cantar con ellos. McFerrin había actuado la noche anterior en la Plaza de la Trinidad, con un repertorio de espirituales, y se metió al público en el bolsillo con su habitual simpatía escénica.
Otros grandes momentos en “la Trini”: Enrico Rava, confirmando al frente de su Tribu su preeminencia en el jazz europeo; John Scofield con más energía que nunca liderando Überjam; Dave Holland con Prism, una de sus bandas más conjuntadas; la Sun Ra Centennial Arkestra, con el nonagenario Marshall Allen de jefe, lanzando su música hacia el espacio intergaláctico por el que vaga el espíritu de Sun Ra; y dos grandes damas de la canción, una veterana, la inconmensurable Dee Dee Bridgewater, que se entregó al público desde la primera nota, y otra más nueva, pero que acumula rápidamente experiencia, Kristin Asbjørnsen.
Volviendo al Kursaal, grandes recitales también de Bugge ‘n’ Friends, el último proyecto del inquieto músico noruego Bugge Wesseltoft al frente de un quinteto multinacional, y del cuarteto de Toshiko Akiyoshi y Lew Tabackin.
Precisamente, uno de los momentos más entrañables del Festival fue la entrega del Premio Donostiako Jazzaldia a Toshiko Akiyoshi. La organización reconoció así el valor personal y artístico de esta pianista y directora de orquesta de origen japonés, que consiguió abrirse camino en una época en que el mundo del jazz estaba dominado por músicos varones y centrado exclusivamente en lo que se hacía en Estados Unidos. El acto de entrega fue por primera vez abierto al público, concretamente en el Basque Culinary Center, y los asistentes disfrutaron de un pequeño concierto de Toshiko Akiyoshi y de la entretenida rueda de prensa que ofreció a continuación.
El Teatro Victoria Eugenia ofreció tres conciertos de jazz de vanguardia: el pianista Muhal Richard Abrams, el trompetista Wadada Leo Smith y su obra magna Ten Freedom Summers, y los polacos An On Bast y Maciej Fortuna interpretando las bandas sonoras para películas del compositor Krzysztof Penderecki. Y dos actuaciones de la deliciosa Orchestre d’Hommes-Orchestres, con un espectáculo basado en las canciones de Kurt Weill.
En el capítulo de los conciertos más populares, habría que empezar por el final, por la última actuación del Escenario Verde, el día 26: Vintage Trouble, que lo dieron todo y el público supo apreciarlo. La playa dejó muchos otros conciertos para el recuerdo: Ray Davies, el que fuera líder de los Kinks; George Clinton y su gran juerga Parliament/Funkadelic; Echo & The Bunnymen, portavoces del rock británico; The Horrors y su desparpajo estético; James Vincent McMorrow y su prodigiosa voz; la frescura juvenil de Austra; y, para acabar, pero no por ello menos importantes, los vascos Delorean, que sí son profetas en su tierra: llenan escenarios fuera y congregaron a una multitud en la Zurriola.
El Museo San Telmo ha sido, otro año más, un sitio idóneo para la experimentación artística reuniendo talentos vascos y europeos. John Tilbury, Sabin Bikandi y Kukai Dantza Konpainia ofrecieron su sugerente creación Bat-batean. No menos sugerente fue la propuesta de Telmo Trio (Hasier Oleaga, Guillermo Lauzurica y la videoartista francesa Fanfy). El pianista donostiarra Iñaki Salvador hizo dos fructíferas asociaciones artísticas con sendos músicos polacos, Andrzej Olejniczak y Maciej Fortuna. Y el acordeonista Aitor Furundarena llevó a cabo un interesante trabajo con el polifacético artista francés Pascal Battus.
El Basque Culinary Center y el restaurante Mugaritz combinaron nuevamente la gastronomía y la música. Y nuevos escenarios se añadieron a los ya habituales del Festival, entre ellos los bares Botanika y Dabadaba, la terraza del Hotel María Cristina y el Mercado de San Martín.
Las terrazas del Kursaal y el Nauticool, el acogedor escenario de la terraza del Club Náutico, vieron todos los días el desfile incesante de miles de personas que buscaban, y encontraban, una música de su gusto.
El Festival ha desarrollado durante su edición 49 una amplia labor en las redes sociales, impulsando un concurso de fotografías en Instagram y superando los 10.000 seguidores en Facebook y los 6.000 en Twitter.
Algunos datos
- 112 conciertos en total.
- 17 escenarios repartidos por toda la ciudad.
- Un total de 140.000 asistentes.
- Concurso de fotografías en Instagram, 10.000 seguidores en Facebook y 6.000 en Twitter.
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Cartel
Txikijazz
El Txikijazz, un festival paralelo para el público infantil y las familias, confirmó en su segunda edición el rotundo éxito cosechado en 2013. Los niños y niñas tuvieron la oportunidad de escuchar música, bailar, practicar manualidades y, en general, aprender y disfrutar con el arte. Son reseñables, por ejemplo, los talleres de danza jazz, funky, music box, percusión, y DJ mediante aplicación para móvil. Los conciertos del Txikijazz contaron con músicos de altura, como René Marie, Joseba Irazoki, Mac Jeara’s Band, Rock’n’Kids Band y el Aula de Música de la Orquesta Sinfónica de Euskadi.