Balance

El descenso de público en 1988 generó un déficit económico. El Ayuntamiento de Donostia-San Sebastián encargó la organización del Jazzaldia a una promotora privada, en la creencia de que así podrían reducirse las pérdidas.

La empresa elegida, Tiburón Concerts, optó por un modelo mixto de festival, en la línea de Montreux, donde no sólo tenía cabida el jazz, sino también otras músicas más o menos fronterizas.

Eso explica que en el programa de ese año aparecieran nombres como Desmond Dekker, Johnny Clegg, Wim Mertens (quien presentó en San Sebastián un anticipo de su siguiente disco) y los brasileños Bosco, Veloso y Gilberto. También se ofrecía salsa (Rubén Blades), blues (Robert Cray) y un grupo de gancho comercial (Manhattan Transfer).

Además, claro está, también hubo jazz (Stanley Jordan, Ramsey Lewis, The Lounge Lizards y Bob Berg & Randy Brecker Quintet), pero diluido en el conjunto del programa.

Se utilizaron dos escenarios, la Plaza de la Trinidad y el Velódromo.

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Cartel

Cartel 24 Jazzaldia 1989.

Cartel 24 Jazzaldia 1989.